bruxismo infantil

Bruxismo Infantil: Síntomas, Causas y Tratamientos

A continuación os vamos a hablar del bruxismo, un trastorno muy común en nuestra sociedad. Se ha determinado que al menos un 20% de la sociedad en España sufre bruxismo, al menos una vez en su vida.

Esta patología, que es muy molesta y desesperante, no solo afecta a los adultos, sino que también hay niños que la pueden sufrir, por eso en el artículo que os traemos hoy os vamos a hablar del bruxismo en niños.

Recuerda que, en nuestra clínica dental, estamos especializados en tratamientos de bruxismo, ¡consúltanos!

¿Qué es el Bruxismo y cuáles son sus causas?

El Bruxismo es una patología de la boca en la que la mandíbula realiza movimientos no funcionales durante el día y/ o la noche de forma involuntaria.  En estos movimientos los dientes de la parte superior y los de la inferior entran en contacto provocando lo que se conoce como fricción o rechinamiento.

En concreto, el bruxismo infantil suele aparecer entre los seis y los diez años, justo coincidiendo con la caída de los dientes de leche y la aparición de los dientes definitivos.  La dentición es, por tanto, una de las causas de la aparición de este trastorno, pero no la única.

Otra de las causas que están asociadas al bruxismo son todas aquellas que tangan ver con razones mentales y emocionales.  El estrés y la ansiedad son una de las causas más habituales. Aunque no parezca que los niños sufren estrés, la realidad es que sí que pueden padecer ciertos episodios estresantes.

Por ejemplo, puede que les genere ansiedad alguna situación en el colegio, tener un hermano recién nacido, una mudanza o la separación de los padres, es algo que les puede afectar mucho.

Por último, también pueden causar bruxismo motivos físicos, como una malformación dental,  sonambulismo, terrores nocturnos o parásitos intestinales que dan lugar a nerviosismo.

Síntomas

En cuanto a los síntomas, éstos son bastante visibles y fáciles de detectar. Podemos encontrar alguno de los siguientes:

  • Apretamiento de la mandíbula
  • Rechinamiento de los dientes
  • Golpeo intermitente de los dientes
  • Dolor de la mandíbula e hinchazón, lo que provoca que no quiera comer o lavarse los dientes.
  • Dolores de cabeza u oídos
  • Alteración del sueño

Las consecuencias de padecer bruxismo son el desgaste del esmalte dental,  aumento de la sensibilidad de la temperatura, dolor facial, astillamiento de los dientes o problemas en la articulación temporomandibular.

Tratamientos contra bruxismo

Ante la mínima sospecha de que se está padeciendo bruxismo infantil, se debe de acudir a un odontólogo para empezar un tratamiento adecuado.

Para tratar el bruxismo se suele utilizar una férula de descarga para reducir el efecto sobre los dientes y evitar el dolor. Esta férula puede ser de silicona o una placa miorrelajante.

En algunos casos es aconsejable, además de llevar la férula, contactar con un fisioterapeuta para ayudar a relajar la tensión de  los músculos  de la mandíbula.

Además de acudir a un dentista profesional, como la mayoría de los trastornos de bruxismo son causados por motivos psicológicos y emocionales, hay que acudir a un profesional en este ámbito para encontrar su causa y poder erradicarla.

A su vez, se aconseja que los niños que sufren bruxismo infantil  disminuyan drásticamente la actividad física antes de ir a la cama y que no utilicen ordenador, móviles o cualquier aparato tecnológico que pueda alterarles. Es recomendable, entonces, antes de ir a dormir darles un baño caliente o leerles un cuento.

La mayoría de los niños superar el bruxismo con el tratamiento, no obstante es aconsejable acudir a revisión al odontólogo para mantenerlo a raya o prevenir que pueda volver a aparecer.